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Y los años llegaron con sus prisas,dejando unas huellas bien marcadas,
quedando las espinas tan clavadas,
ojos rugosos, labios sin sonrisas.
Esos hilos de vida en esas guisas,
el tiempo las convierte más tensadas,rozaduras que sin ser evitadas,
dándole final a días de brisas.
El tiempo muestra su perfil deforme,
con los pasos torcidos al extremo,
envuelto en oleajes y ni un remo.
Un suspiro infeliz con uniforme,
por bosques
tristes de melancolía,apagando ilusión y la alegría.
Muito linda e bem inspirada tua poesia,Lola! beijos, ótimo domingo! chica
ResponderEliminarcuando somos niños o adolescentes un año es una eternidad, y ahora se va en un suspiro. no se percibe el tiempo de la misma manera. pero bueno, la vida adulta también tiene algunas cosas buenas.
ResponderEliminarmuy bonito poema. abrazos, lola!
Buenas noches, amiga Lola. El tiempo es un río de aguas bravas, cada día corre veloz hacia el mar. Tenemos el ahora, tú nos lo recuerdas. No sientas pesar, es el ciclo de la vida. Un gran abrazo, querida Lola.
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